De repente, un extraño
martes, 4 de octubre de 2005
Se acabó. Ha terminado. C'est fini. Los oscuros días han finalizado y una nueva era se abre ante nosotros. Y es que... tenemos nuevo compañero de piso!!! Tras el lento éxodo de las antiguas compañeras (eterno, casi diria yo), que ha dejado innumerables restos en su camino, un nuevo participante ha osado a entrar en la casa de tu vida. El pobre va a pasar a mis antiguas dependencias y yo me traslado a un cuarto un poquito más grande, donde no tengo que jugar al tetris para poner las cosas y puedo dejar las clases de contorsionista para poder salir del cuarto (ya pondré documentación gráfica de la nueva disposición). Eso sí, el salón sigue siendo un basurero, como bien recordarán los que han pasado por nuestra humilde morada, y la idea de montar un mercadillo cada día resulta más atractiva. Así que de nuevo somos cuatro, algo así como ABBA (aunque más que Chiquitita, será Maritxu nora zoaz?).De todas maneras, parece que este año no pintan bastos y que se ve una luz al final del pasillo. O es el móvil de la nazi sonando?
Etiquetas: Yo...
2 Comments:
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
¿En serio no pensáis arreglar nunca el salón?
¿Quién es el dueño de esta pocilga?