John Rambo
miércoles, 6 de febrero de 2008
En la página de Loqueyotediga me he encontrado este curioso cuadro.
Se trata de un cuadro resumen con las estadísticas de Rambo en cada una de las películas de la saga. Obviando el temor que me produce que alguien se ponga a ver la película fijándose en este aspectos, como analista que soy, voy a extraer una serie de conclusiones de los siguientes datos:
- A medida que la plenitud física se ha ido alejando, Rambo mata más con la camiseta física. Los años no perdonan a nadie y no es cuestión de matar a un "amarillo" enseñando la tripa cervecera. Eso sí, en 1985, hiperanabolizado, mató al 66% de los malos con el movimiento de los pectorales.
- Sabe más el diablo por viejo que por diablo. Y es que la experiencia es un grado. A medida que se ha ido haciendo mayor, Rambo no sólo ha depurado la técnica, si no que ha diversificado la mecánica y adquiriendo nuevas constumbres. ¿Más rápidas y sencillas? ¿O es que ahora tiene más tiempo por ir menos al gimnasio? Si es que en Marina D'Or y los viajes del Inserso tienen unos cursillos... Y nada de a cuchilladas como en la primera. En la variedad está el gusto.
- Como buen director, Rambo también ha aprendido los beneficios del trabajo en equipo, la jerarquización de las funciones y del trabajo, y a aprendido a delegar. Así, si el trabajo lo hacía todo él (apenas dejó margen en la segunda, y en la tercera se puso en plan pataleta "que los mato yo a todos, que para algo es mi peli y con esta me despido"), en la cuarta entrega ha permitido participar a otros. ¿Será artritis o quizás esté preparando a su sucesor?
- Rambo busca la veracidad y el realismo y en la última secuela han muerto más inocentes que nunca. Prácticamente la mitad. Es posible que se haya inspirado en las leyes de paridad y ha decidido que haya tantos cadáveres de malos como de buenos. O quizás es que ya no es tan hábil y se les escapan más malos que matan a más gente. Lo cierto es que es cuando más gente muere y todo se debe al numeroso grupo de inocentes que mueren.
- Por eso mismo es cuando más muertos por minuto hay y cuando más rápido muere alguien. Es normal. Para meter 236 muertos, o la bomba es enorme, o te los empiezas a cargar rapidito.
- Pocos tiros recibe Rambo y es que es normal. Con su edad, no resultaría creíble que recibiera las 38 heridas de la tercera. Con tres se desmontaría más rápido que el Sr. Potato.
- La tortura está mal vista pero es necesaria para el realismo (tanto como los más de 80 malos que mata un sólo hombre). Así que nos quedamos a media. ¡Qué daño ha hecho Abu Ghraib y Hostel a héroes como Rambo!
- Pero si hay una premisa inexorable, es la siguiente: Rambo no moja. Tampoco es cuestión verle darle a la pastillita azul. O es que la relación con el Coronel Truman es más estrecha de los que parece? ¿Será por eso que no siente las piernas?
Etiquetas: Cine
1 Comment:
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Qué bueno.
En cualquier caso, Acorralado es una buena película de acción. El resto, auténtica peste.